Whiplash: ¿Cuál es tu límite?

Luces, cámara y música. El arte de las musas viene acompañada de esta ocasión por una alta dosis de sacrificio y presión, como para que no nos atrevamos más nunca a decir que "el que es músico, es un conformista".

La prueba es la película que tenemos para evaluar a continuación: Whiplash. Con un porcentaje altísimo (8,6 de 10) y sustentando en Metascore un pontaje de 88 sobre 100, no es raro considerar que forma parte de las que próximamente serán filmes de culto.

Sin duda alguna, nadie le puede quitar su lugar en el top 10 de mejores películas del 2014, y es que incluso sin ser simpatizante del jazz, que es la música que se exhibe en este gran film independiente, tiene un efecto envolvente en el espectador desde el primer momento en el que encontramos a Andrew Neyman (Miles Teller) tocando la batería.

ALERTA DE SPOILER (si no has visto el filme, deja de leer acá).

La ambición de Neyman y las ganas de superarse cada vez mas quizás superan el talento que en realidad este poseía, pero que lo explotaba a su límite y por eso conseguía destacar. Terrence Fletcher (J.K. Simmons) es parte fundamental de esto. Cuando se realiza el primer contacto entre ambos personajes, ya Andrew de alguna manera intuye que no está tratando con un instructor con carácter fácil; sin embargo, desconocía lo que en realidad éste era capaz de hacer para conseguir lo que quería.

Fletcher al principio mostraba un extraño interés en el joven baterista, preguntándole por su familia y por sus aficiones en el ámbito musical. Arma que inteligentemente luego utilizaría para sacar la vulnerabilidad y llevarlo al límite de quebrarlo emocionalmente cuando este se equivocaba.

Regaños intensos unidos con una rigidez extraordinaria se fueron haciendo costumbre para él, que iba entrando en un nuevo mundo. No se imaginó nunca que ese sería el trato para todos, que pretendían trabajar mejor que cualquier reloj suizo.

Así va evolucionando la experiencia de Andrew dentro del instituto. Sufrió bastante para poder conseguir un sitio en el grupo principal de la orquesta pero sabía que ese sacrificio seguiría presente. Nos damos cuenta que el carácter introvertido del joven, que es impulsado por el abandono moral en su familia al ser la sombra de un hermano jugador de fútbol americano y otro abogado, va desapareciendo según avanza la película.

Quizás esto desaparece por la confianza que se tiene por saber en lo que se ha convertido, o por que en más de una ocasión su director trata de sacarlo de sus casillas. Lo cierto es que el abandono y la falta de amistades influyen. Ya no tendría más profesores por que debía saberlo todo y estaba totalmente sólo (por deseo propio, ya que decidió separarse de su pareja por miedo a que esta fuera un obstáculo). Se limitó a escuchar a "los grandes del jazz", y la obsesión se apoderó de el. Cada frustración era una motivación extra.

Todo el mérito del mundo para el guionista y director Damien Chazzelle, consiguiendo que dos personajes tan diferentes como lo son Andrew Neyman y Terrence Fletcher se complementen el uno al otro de manera perfecta, siguiendo un metodo propio que marca una filosofia de vida por conseguir los objetivos, cada uno con un rumbo muy distinto, pero que al fin y al cabo buscan exigirse más de lo que pueden para lograr un potencial y un éxito rotundo.

El ingrediente especial del cual jamás nos despegamos es la increíble tensión que se marca por una especie de competencia entre ambos, que saben que trabajan para el mismo equipo. Esto crea en nosotros la percepción de que se enfrentan siempre cuando están guiados por una misma pasión.

La premisa de Fletcher es revelada después de la mitad de la película. Para él, su doctrina está justificada por la búsqueda de una auténtica leyenda en la batería del jazz.

Considera que el método para conseguir los logros es explotar al máximo a los pupilos sin importar cuánto cueste hacerlo.

Este es el debate principal, el que nos hace a todos pensar después de verla. ¿Hasta qué punto debemos esforzarnos? ¿Cuánto nos tienen que exigir? ¿Todas las personas reaccionarían igual ante esta presión? ¿El que no responda así, de verdad no es el indicado según lo que expresa J.K Simmons en su papel?

Esto lo dejamos a decisión propia. Lo cierto es que como ya aclaramos, los dos personajes principales se complementan tanto en actitud como en personalidad. Fletcher es el mejor maestro para Neyman, y Neyman el mejor alumno para Fletcher.

Mejor actuación: J.K. Simmons interpretó el rol mas importante de toda su carrera como actor, el papel de su vida, y evidentemente fue la mejor actuacion de todo el film. Mostrando un carácter agresivo y determinante y sobrepasando el límite de todo lo que se considera ético, encaja perfectamente en su puesto, dándole vida a ese profesor al que nadie sabe si le tiene temor o respeto, pero que nadie es capaz de dudar del talento innato que lleva en sus venas.

Escena más relevante: Sin duda alguna la escena que marca el hito y el punto más algido es cuando Neyman interrumpe en su discurso a Fletcher para empezar con "Caravan", la canción con la que acaba la cinta. Este se roba el escenario y su maestro al darse cuenta que nada puede hacer, sabe que ya no es un diamante en bruto. El silencio seguido por la mirada directa entre ambos es impactante. Fletcher le dice sin hablar a Neyman: "Eres tú". Y así culmina la historia con un sólo epopéyico de percusión. El nuevo "Bird" ha nacido.